Los 280 caracteres de Twitter son una realidad desde hace cinco meses. La red social decidió ampliar el límite de caracteres a raíz de un estudio interno para que los usuarios pudiesen expresar sus ideas con mayor libertad y sin límite de espacio.
Pero el resultado no ha sido el esperado....
El propio CEO de Twitter, Jack Dorsey, ha confirmado que 5 meses después, los tuiteros siguen escribiendo mensajes cortos (de unos 50 caracteres de media) respetando la filosofía original con la que nació la red social de los 140 caracteres. Es decir, que se confirma el dicho popular de que “a buen entendedor, pocas palabras bastan”. Sin embargo, lo que sí ha aumentado a raíz de la ampliación de caracteres es el engagement de los tuits. Después de la ampliación de caracteres a 280, los usuarios han empezado a enviar más mensajes y hacer más retuits y menciones.
Una vez más, la comunidad online ha demostrado saber adaptar las herramientas a sus necesidades. De hecho, los cambios que ha introducido recientemente Facebook para mostrar menos publicaciones de páginas u organizar a los medios según el grado de fiabilidad podrían hacer incluso que Twitter se convierta en el nuevo Facebook.
De momento, los buenos resultados respaldan a la red de microblogging. De hecho, Twitter ha cerrado el 2017 con 91 millones de dólares de beneficio, frente a las pérdidas de 167 millones que registró en el mismo período de 2016. Se trata del primer ejercicio en positivo desde la fundación de Twitter hace 12 años.