El gigante de la alimentación Unilever ha anunciado que dejará de hacer publicidad sobre helados dirigida a niños menores de 12 años. Una decisión que se hará efectiva a finales de 2020. La estrategia ha sido puesta en marcha como parte del compromiso de la marca con la salud de los más pequeños y para evitar problemas de salud como la obesidad infantil.

La compañía, que incorpora dentro de su brand portfolio nombres como Frigo, Magnum, Ben&Jerry’s, CarteD’Or o Cornetto; lanzará una gama de productos especialmente fabricados para los niños que “no contendrán más de 110 calorías ni más de 12 gramos de azúcar por porción”, según apuntan.

La medida de dejar de hacer publicidad de helados para menores de 12 años se aplicará en medios tradicionales como la televisión (donde la audiencia de estos anuncios en esta franja de edad representa el 25% del total) como en sus canales en redes sociales. “Estamos implementando controles estrictos sobre el contenido y emisión de nuestros anuncios y no usaremos influencers o celebrities cuyo público sean los menores de 12 años”. La compañía asegura además estar limitando el uso de personajes animados a productos con un perfil nutricional específico.

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El proyecto denominado “Responsibly made for kids” ha sido diseñado para ayudar a padres, cuidadores y niños a tomar decisiones informadas sobre su consumo a través de asumir una responsabilidad en las áreas de comunicación, venta y desarrollo del producto. La promesa ha afectado principalmente al helado a raíz de que la OMS declarase la obesidad infantil como “uno de los mayores problemas de salud pública del siglo XXI”. La previsión es que la medida se extienda a otros alimentos y bebidas.