El humo y la comunicación de vapeadores se cuelan en las redes sociales

  • Los fabricantes aprovechan los vacíos legales para promocionarse en plataformas digitales
  • Organizaciones sanitarias consideran que la exposición aumenta la predisposición al consumo de tabaco
El humo y la comunicación de vapeadores se cuelan en las redes sociales

Vestida con traje de comunión, abre ilusionada una bonita caja que, bajo confeti de colores, esconde un puñado de vapeadores desechables de distintos sabores. 
Es el contenido de un vídeo que se ha hecho viral recientemente y que ha sorprendido y dejado perplejos a muchos ciudadanos de nuestro país porque evidencia la temprana edad a la que los jóvenes tiene acceso a este tipo de productos, así como su penetración en los hábitos de consumo. Cuestiones ambas relacionadas con su presencia en las redes sociales y un vacío en la regulación pertinente. 

Los cigarrillos electrónicos y los vapeadores han ganado peso entre los consumidores a lo largo de los últimos años a raíz, por un lado, de las prohibiciones contempladas en conocida Ley Antitabaco, que entró en vigor en 2006, y por otro, una comunicación por parte de los fabricantes de dispositivos electrónicos centrada en el posicionamiento como alternativa al tabaco tradicional. 

Lo cierto es que las marcas del sector se han promocionado, tanto en sus páginas web como en sus redes sociales o publicidad exterior, como productos favorables, incluso, para dejar de fumar. Por ejemplo, la marca Frumist asegura en la descripción de sus vapeadores que ofrece “al mundo una solución única y una alternativa más saludable al tabaco”; mientras que PharmaVap apunta que se dedica a “cubrir las necesidades de aquellas personas que buscan un producto innovador y de alta calidad para evitar los efectos negativos de la nicotina”. 

Presencia en redes sociales y comercios

Con esta narrativa invitan a los consumidores a disfrutar de los distintos sabores de su catálogo, entre los que se pueden encontrar sandía, refresco de cola, menta, frutos del bosque o algodón de azúcar. Tanto los vapeadores como sus recargas, en el caso de que no sean desechables, pueden adquirirse en tiendas online o en comercios físicos, como farmacias o droguerías. 

Así, en portales como lafarmaciaonline.es o farmaciasdirect.com pueden comprarse los productos de PharmaVap, que asegura que no contienen nicotina; mientras que, por ejemplo en Primor pueden adquirirse los de Vop Vapes, que dispone de versiones tanto con como sin nicotina. Es más, la cadena de perfumerías le dedica un espacio a este tipo de dispositivos en su página web, que señala que los cigarrillos electrónicos son “una alternativa al tabaco que no deja de ganar seguidores”, pero advierte que “aunque son menos nocivos que el tabaco, no están exentos de riesgos” y recuerda que es importante no abusar de su consumo y que su venta está totalmente prohibida a menores de edad. 

La regulación actual no prohíbe, de momento, la venta de este tipo de productos en establecimientos como las farmacias, pese a que, desde distintas asociaciones y organizaciones han señalado sus efectos perjudiciales en la salud. Desde la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) destacan que “en estos productos se han encontrado sustancias clasificadas como cancerígenas, en concreto en los líquidos y aerosoles que utilizan”.

Noticias Relacionadas

The Beemine Lab recurre al humor para desterrar prejuicios en torno al CBD

Esta marca de lencería eleva la conciencia sobre la detección precoz del cáncer de mama mostrando a sus modelos con los gestos de la autoexploración

"Debemos ser conscientes de que estos productos no generan vapor, sino aerosol, es decir, pequeñas partículas sólidas suspendidas en un gas que, al inhalarse, fácilmente pueden quedarse atrapadas en nuestros pulmones", explican. “En cuanto a su éxito como herramienta para dejar de fumar la realidad es que no resultan eficaces a medio y largo plazo. Pocos fumadores acaban sustituyendo completamente el consumo de tabaco por el vapeo y rara vez este cese es definitivo”.

Huecos en la regulación

Es por ello que en 2020 el Ministerio de Sanidad propuso equiparar las exigencias de publicidad de los cigarrillos electrónicos a las del tabaco, así como regular su comercialización e igualar su fiscalidad. Medidas recogidas en el Plan Integral de Prevención y Control del Tabaquismo 2021-2025 que, pese a estar redactado desde hace años aún no ha visto la luz.

Actualmente, los cigarrillos electrónicos con nicotina estarían regulados atendiendo a lo recogido en el Real Decreto-ley 17/2017. Este establece, en relación a dispositivos susceptibles de liberación de nicotina y envases de recarga, que quedan prohibidas las comunicaciones comerciales en los servicios de la sociedad de la información, en la prensa y en demás publicaciones impresas, que tengan por fin o por efecto directo o indirecto su promoción, con la excepción de las publicaciones destinadas exclusivamente a los profesionales del comercio de los productos. 

La regulación prohibe la comunicación comercial audiovisual de cigarrillos y productos de tabaco

Además, también contempla la prohibición de las comunicaciones comerciales audiovisuales según la Ley 7/2010, de 31 de marzo, General de la Comunicación Audiovisual. Esta, en su artículo 18, prohibe la comunicación comercial de cigarrillos y demás productos de tabaco, así como de las empresas que los producen. 

Sin embargo, la regulación contaría aún con vacíos legales, especialmente en lo que respecta a los vapeadores o cigarrillos electrónicos que se presentan como carentes de nicotina. Estos han aprovechado los huecos de la normativa para ganar terreno comunicativo, especialmente en las redes sociales, donde ponen el foco principalmente en su amplio catálogo de sabores, como las palomitas o las chucherías, los cuales despertarían su atractivo para el público más joven. 

Además, se vinculan también a influencers, en algunos casos de manera encubierta, y mediante la realización de sorteos con otros productos o en asociación con otras marcas. Blu, por ejemplo, se vinculó al creador de contenido Telmo Trenado para ofrecer un viaje de Waynabox por Europa. 

Como antesala del tabaco

Desde el Comité Nacional para la Prevención del Tabaquismo (CNPT) consideran que este tipo de dispositivos, especialmente aquellos que contienen nicotina, "son el "caballo de Troya" de la industria tabaquera para captar nuevos fumadores". Apuntan que "lejos de reducir riesgos, los multiplican, porque en más del 60% de los casos se acaba produciendo un consumo dual de cigarrillo electrónico y tabaco de combustión". 

Advierten, además, de que no son inocuos y que provocan que los ciudadanos se conviertan en fumadores a edades cada vez más tempranas. "Si la edad media del primer contacto con el tabaco convencional está en los 14 años, con los vapeadores y cigarrillos electrónicos estamos viendo cómo hay chicos y chicas que tienen su primer contacto con la nicotina a los 11 años o incluso antes", ha señalado recientemente Andrés Zamorano, Presidente del Comité. 

Es más, según un estudio de la AECC realizado a1.730 personas entre 16 y 21 años y publicado en abril, nueve de cada diez jóvenes españoles han estado expuestos en el último mes al tabaco, al vapeo o a los cigarrillos electrónicos a través de las redes sociales y de plataformas de vídeo bajo demanda. Además, el 57% de los encuestados considera que vapear está de moda porque lo hacen actores e influencers.

En un informe de la OMS (Organización Mundial de la Salud) de 2021, la organización apuntaba que este tipo de productos “van dirigidos con frecuencia a niños y adolescentes en las promociones de las industrias tabacaleras e industrias conexas que los fabrican, mediante miles de aromas atractivos y afirmaciones engañosas”. También apuntaba que los niños que consumen dichos productos tienen hasta el triple de probabilidades de consumir productos de tabaco en el futuro.

Noticias Relacionadas

Irlanda será el primer país del mundo en incluir advertencias sobre salud en las etiquetas de las bebidas alcohólicas

Es por ello que múltiples asociaciones vinculadas a la lucha contra el tabaquismo, las adicciones, o las enfermedades relacionadas reclaman un endurecimiento de la regulación, tanto a nivel nacional como internacional. Australia es uno de los países que busca tomar medidas en este sentido, con una propuesta orientada a prohibir el uso recreacional de los vapeadores, dispositivos que ha definido como la "nueva amenaza" a la salud pública del país, tal y como recoge La Vanguardia. 

En esta línea, el pasado 23 de noviembre entró en vigor una normativa de la Unión Europea para prohibir la venta de productos de tabaco calentado aromatizado. No obstante, los gobiernos cuentan hasta el próximo mes de octubre para aplicar las reglas en su legislación nacional. La medida buscaría proteger a los ciudadanos, especialmente a los más jóvenes, frente a los efectos nocivos de este tipo de productos y lograr “una generación sin tabaco”.